SAN PETERSBURGO: EL SUEÑO DE UN ZAR

El escritor Dostoievski, definió a San Petersburgo como: “La ciudad más inventada, la más fantástica y premeditada del mundo”.

• LOS TRES NOMBRES

Esta preciosa ciudad de tan sólo tres siglos de historia fue fundada por el zar Pedro El Grande, quien le puso el nombre en referencia a San Pedro, el guardián del cielo.

Pedro el Grande pensaba que debía tomar ejemplo de Europa si quería desarrollar su ciudad. Reunió a los mejores arquitectos y artistas del momento para crear de la nada la ciudad más bonita del mundo. Así consiguió que la ciudad pareciese un elegante y monumental museo a cielo abierto.

La ciudad ha tenido tres cambios de nombre:

-San Petersburgo, que fue el nombre inicial y el actual,  

-Petrogrado se puso debido al sentimiento anti alemán que hubo en Rusia tras la Primera Guerra Mundial, ya que Petrogrado sonaba más ruso.

 -Leningrado, en honor a Lenin. Este nombre estuvo vigente desde la muerte de este hasta la caída de la URSS en 1991. El nombre recuerda a la Segunda Guerra Mundial, al deshielo de Jrushchov y la perestroika.

San Petersburgo fue la capital de Rusia durante la época Imperial, desde 1703 a 1918, por eso la mayor parte de sus edificios y palacios de estilo europeo, son de esta época. En 1918 Lenin decide cambiar la capital a Moscú.

Existe otra ciudad que lleva este mismo nombre que la Rusa pero se encuentra en EE.UU. Se trata de una ciudad ubicada en la región de Tampa en la península de Florida. Es la cuarta ciudad más grande de la Florida y es conocida como “La ciudad donde brilla el sol.

• EL ZAR PEDRO I EL GRANDE

El sobrenombre de Pedro El Grande, le viene por su aspecto físico. El pobre no era muy agraciado ya que contemporáneos suyos lo describen como:” Largo, de pequeñas piernas delgadas de alambre, y con la cabeza tan pequeña en relación con el resto de su cuerpo que parecía más algún tipo de muñeco que una persona viviente. Sufría de un constante tic y siempre estaba haciendo muecas: guiñando los ojos, frunciendo la boca y la nariz y moviendo la mandíbula” (Valeri Serov). Posiblemente Pedro padecía de epilepsia.

Pedro el Grande era tan supersticioso como sus súbditos y, en ausencia de ciencia médica, creía en pociones curativas, como la hecha con “cuerno de unicornio “. Una especie de cura universal que aliviaba todas las enfermedades. El polvo de cuerno de unicornio costaba su peso en oro, y los zares y los nobles solían disolverlo en bebidas para ingerirlo. Pero los unicornios no existen, así que los astutos médicos-brujos del siglo XVII utilizaban los colmillos de ballena narval que se asemejaban a los cuernos del legendario unicornio e hicieron fortunas con ellos.

Hay que añadir que Pedro el Grande heredó el puesto de zar a muy temprana edad, con sólo 10 añitos junto con su hermano Iván, el cual no tenía muchas dotes para el puesto. Así que ambos se sentaban en un doble trono con un agujero desde donde Sofia hermana de ambos era la que escuchaba y aconsejaba lo que debían hacer y decir. Luego Pedro siguió siendo manipulado por su madre y obligado a casarse con Eudoxia Lopujiná. La boda fue un fracaso que desembocó en que Eudoxia se viera obligada a meterse monja y lo mismo terminó haciendo con su manipuladora hermana Sofia. Al final tras la muerte de su madre y su hermano Iván, Pedro I por fin alcanza la independencia y el control sobre Rusia. El zar tenía un gabinete de curiosidades que iba recopilando. Este gabinete estaba repleto de cadáveres, dentadura, lenguas, genitales y fenómenos. En un frasco de formol conservo la cabeza de una de sus amantes, la condesa Maria Hamilton, a quien besó antes de que la decapitaran. También tenía entre otras rarezas el cadáver de un niño con tres cabezas o un cordero con cinco patas. Sentía fascinación por los enanos, los gigantes y los deformes.

• EL MUSEO DE HERMITAGE

Sin duda uno de los museos más importantes del mundo. Fue creado por una mujer, la emperatriz Catalina II, pero es curioso que todos los directores que han pasado por él han sido hombres.

Se encuentra ubicado parcialmente en el Palacio de Invierno que fue la residencia oficial de los zares de la Época Imperial y el icono de la Revolución Bolchevique en la que el pueblo, cansado de los privilegios de los zares, decidieron dar un giro al destino de Rusia.

Construido en una escala monumental para ser el reflejo de la grandeza y el poder de la Rusia Imperial. Desde el palacio, el zar gobernaba sobre un territorio de 22.400.000 km² y sobre 176,4 millones de personas.

Este majestuoso palacio, con una llamativa fachada de color verde, cuenta con unas 1500 habitaciones, 1945 puertas y 2000 ventanas, las cuales tenía los cristales cubiertos con inscripciones hechas con añillos de diamantes de las damas de honor y ayudantes de los zares. Sólo una ventana sobrevivió a la Revolución: la de la emperatriz Alexandra Fyodorovna, esposa de Nicolás II, en la cual se puede leer una inscripción en inglés que dice:” Nicky está mirando a los húsares, 17 de marzo”.

El museo se formó con la colección privada que fueron adquiriendo los zares durante varios siglos, y no fue hasta el año 1917 cuando fue declarado Museo Estatal.

El museo cuenta con más de 3 millones de piezas de arte repartidas en 400 salas. Si recorrieses todas las salas deteniéndote 1 minuto en cada una de ellas necesitarías unas 8 horas diarias durante 11 años y andarías unos 24km, ya que la colección completa del Hermitage está repartida en 5 edificios del centro de San Petersburgo.

Por el museo pasan alrededor de 3 millones de visitantes anualmente, pero nadie lo ha visto completo.

Una de las cosas más famosas y llamativas del museo es el famoso reloj del pavo real en la Sala Blanca o Sala del Pabellón. Este reloj está detenido a los 2:10h. de la madrugada ya que fue a esa hora en la que los revolucionarios asaltaron el palacio de invierno el 7 de Noviembre de 1917, cayendo el gobierno ruso en manos de los comunistas.

Durante la Segunda Guerra Mundial los trabajadores del museo permanecieron viviendo en los sótanos del museo ya que era imposible trasladar todos los objetos de valor y pinturas fuera del alcance de las bombas.

En el museo no sólo trabajan personas también tienen unos 50 gatos en sus sótanos que dicen ser descendientes directos de los que pertenecieron al Zar Nicolás II. Son los encargados de velar por el museo y mantenerlo a salvo de roedores. Además de que existe la superstición de que traen buena suerte al mismo. Si quieres puedes adoptar un gato y llevártelo. Sólo necesitas pasar una entrevista y demostrar que eres de confianza. Los propietarios oficiales de un gato del Hermitage reciben un certificado sobre el estatus especial de su nueva mascota. Esto se empezó a hacer en el 2014 cuando el director del museo dijo que tenía que haber un tope de 50 gatos. Los sobrantes son los que se pueden adoptar.

El Hermitage tiene curiosas leyendas de fantasmas que vagan por las salas. Son personajes que salen de los cuadros y otros casos misteriosos. La historia más famosa cuenta que la figura de cera de Pedro el Grande se pone en movimiento por las noches e incluso hace reverencias si se cruza con alguien. Lo más curioso es que dentro de la figura hay distintas bisagras que permiten cambiar su postura y sentarlo en una silla. Para los que les gustan las historias de miedo, el Hermitage tiene una enigmática pieza en la sala del Antiguo Egipto, la escultura de la diosa Sejmet con cabeza de león, que era extremadamente sanguinaria y anhelaba acabar con toda la raza humana. Una vez al año, supuestamente cuando hay luna llena, sobre las rodillas de la diosa aparece un charco rojizo, parecido a una mancha de sangre, que se seca antes de que llegue el primer visitante.

La entrada al museo, cuesta unos 700 rublos, que en euros vienen a ser más o menos 10€. Evita las colas comprando tu entrada on line o en las máquinas automáticas. Te recomiendo que cojas una visita guiada ya que es fácil que te pierdas en el museo o no veas las obras más importantes. Calcula que vas a estar dentro unas 3 horas y ten en cuenta que cierra los lunes. Si estas en cola para entrar en el museo muy posiblemente se te acercaran para venderte gorros del ejército ruso o matrioskas (esas muñecas que van una dentro de otra) regatea el precio si quieres comprar.

• COLUMNA DEL ZAR ALEJANDRO I

Situado en la plaza del Palacio, es la mayor columna monolítica del mundo.
Su altura es de cerca de 50 metros y fue construida siguiendo el proyecto de Montferrand entre los años 1830-1834 en honor a las victorias de la guerra con Napoleón.
La columna es de granito rojo extraído de una cantera cerca de la ciudad de Viborg y fue trasladada en una barcaza que dado su peso tuvo que ser remolcada por dos barcos.
Como cosa curiosa, la columna se mantiene en pie por su «propio peso» sin utilizar fijación alguna. Esto provoco que la gente no quisiera pasar cerca de ella por si se caía. Asi que el autor tenía que pasar todos los día por ella para demostrar que no había ningún problema.

El remate de la columna tiene un ángel de bronce con la cara que el zar Alejandro I. El ángel utiliza una cruz para aplastar una serpiente simbólicamente. Esto representa el triunfo del bien sobre el mal.
El pedestal tiene un bajorrelieve de bronce con una inscripción: «Alejandro I, Rusia agradecida».

• LAS CUATRO CATEDRALES:

-CATEDRAL DEL SALVADOR SOBRE LA SANGRE DERRAMADA.

Es la catedral más famosa de San Petersburgo.

Declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, la Iglesia es una obra de arte por dentro y por fuera. Su aspecto exterior, sigue el más puro estilo ortodoxo ruso, destaca por sus cinco grandes cúpulas bulbosas (como cebollas), multicolores o doradas, así como por los minuciosos detalles de los adornos que cubren su fachada de ladrillo rojo y marrón.

En su interior nos esperan paredes y techos llenos de frescos y mosaicos que los cubren sin dejar un espacio libre.

Existe una tradición en Rusia según la cual se erige una iglesia o capilla en el lugar exacto donde ha tenido lugar un acontecimiento histórico, muchas veces de tintes trágicos. En este caso el acontecimiento que tuvo lugar aquí fue el atentado contra el zar Alejandro II en 1881. Un templete de rodonita, jaspe y serpentina ocupa ahora el lugar donde el zar fue asesinado por una bomba, cuando viajaba en un coche de caballos camino del Cuartel de la Manege.

Esta iglesia está cargada también de simbolismo: su altura de 81 metros por el año de la muerte del zar (1881), los 62 metros de las cúpulas laterales, por la edad del zar cuando murió (62 años).

La entrada cuesta unos 350 rublos.

-CATEDRAL DE NUESTRA SEÑORA DE KAZÁN

Destaca por su impresionante columnata. Tiene 96 columnas lo que la hacen en cierta medida parecida a la de San Pedro del Vaticano. Es la principal iglesia de la ciudad y en su interior se encuentra un icono de la Virgen de Kazán que es venerada con mucho fervor.

-LA CATEDRAL DE SAN ISAAC

Tiene una capacidad para 13.000 personas y mide 101 metros. Su tamaño, la convierte en la cuarta más grande del mundo, esto le permite ser claramente visible desde el aire y es lo que la salvó de ser bombardeada durante la Segunda Guerra Mundial. Se cree que las tropas nazis utilizaron su cúpula como punto de referencia. Una parte importante de los tesoros del museo fueron evacuados y almacenados en los sótanos de la catedral. La cúpula principal es la cuarta más alta y la cúpula de oro más grande del mundo. Se apoya sobre una enorme columnata circular con una terraza panorámica donde puedes subir para tener unas increíbles vistas de la ciudad. Esta catedral ortodoxa no es la típica ya que por dentro es austera y tiene tono oscuro. Entrar cuesta 250 rublos a parte debes de pagar si quieres subir hasta la terraza.

-CATEDRAL DE SAN PEDRO Y SAN PABLO

Ocupa el segundo lugar más visitado de la ciudad, tras el Museo del Hermitage. Aquí descansan los cuerpos de casi todos los zares rusos de la familia Romanov, desde Pedro el Grande a Nicolás II. La catedral se encuentra ubicada en la fortaleza que recibe el mismo nombre. Con sus 122 metros de altura es el edificio más alto de la ciudad. Los edificios nuevos tienen prohibido superar esa altura.

• LA FORTALEZA DE SAN PEDRO Y SAN PABLO

Es aquí donde se localiza el punto exacto donde se inició la fundación en 1703 de San Petersburgo. Aquí se encuentra el campanario ortodoxo más alto del mundo. Esta fortaleza diseñada en forma de estrella, nunca fue escenario de ninguna batalla, pero ha tenido múltiples usos: ha servido como cripta imperial, como prisión para revolucionarios y miembros de la dinastía Romanov e incluso como laboratorio científico soviético de alto secreto. Todos los días a las 12 suenan las campanas y se dispara un cañonazo. Esto permitía antiguamente a los habitantes sincronizar sus relojes.

Según cuenta una leyenda, la isla estaba habitada por gran cantidad de liebres. Una de ellas saltó sobre las botas del zar Pedro I cuando llegó en barco a la isla. Cerca del puente, que conecta la fortaleza con el continente, hay un monumento dedicado a la liebre. Se dice que si tiras una moneda al monumento de la liebre y no cae al agua, tendrás mucha suerte.  

• EL PALACIO DE PETERHOF

Es conocido como el Versalles ruso. Declarado Patrimonio de la humanidad por la Unesco, sus palacios y jardines, son una visita que no te debes perder.

Situado en el golfo de Finlandia, a unos 30 kilómetros al oeste de San Petersburgo, se encuentra esta ciudad que fue creada por Pedro el Grande. Hasta la Revolución de 1917, fue la residencia de los zares, pero en 1918 se transformó en museo con reliquias y mobiliario que los zares utilizaban en su día a día… Durante la Segunda Guerra Mundial fue ocupado y destrozado por las tropas alemanas. Después de la Segunda Guerra Mundial empezó su restauración.

La ciudad de Peterhof se compone de diversos palacios, museos, iglesias y otras construcciones: El más importante es el Palacio Grande, de estilo barroco se encuentra situado en el corazón de Peterhof. Era la antigua residencia de verano de los zares rusos. Se eleva por encima de la denominada Gran Cascada y del parque inferior. No se pueden hacer fotos ni tocar nada, y hay que ponerse patucos para no estropear el suelo de madera. Destaca la sala de objetos orientales. También las habitaciones y salas de estar, cuadros con pinturas de los diferentes zares e interminables pasillos.

Lo más bonito: Los Jardines y fuentes. En el Parque superior, se sitúa a la entrada del parque y se compone de cinco fuentes. El Parque inferior es mucho más espectacular pero no es gratuito y da acceso al recinto en el que se encuentran los diferentes palacios y construcciones, así como el complejo de fuentes más grande del mundo. Tiene una extensión de más de 100 hectáreas. El agua que utilizan las fuentes proviene de manantiales naturales. A lo largo del parque inferior existen multitud de fuentes y cascadas como la Gran cascada y la fuente de Sansón. Todos los días durante la temporada estival a las 11:00 de la mañana se puede ver el lanzamiento del más famoso conjunto de fuentes, la gran cascada, que se extiende desde la fachada norte del Palacio Grande, hasta el canal de marina que comprende 64 fuentes diferentes y más de 200 estatuas de bronce. Es verdaderamente espectacular.

Si vas en agosto hay muchas colas sobre todo de cruceristas que desembarcan para hacer una excursión por San Petersburgo. Si vas a desplazarte adrede ten en cuenta que los lunes el palacio está cerrado.

• EL PALACIO DE CATALINA

No contentos con el palacio de Peterhof pronto decidieron levantar otro, a 25 km de San Petersburgo, convirtiéndose en un impresionante y fastuoso lugar de veraneo que no tenía nada que envidiar al anterior. Durante la ocupación nazi en la Segunda Guerra Mundial se llevaron algunos de sus tesoros como la famosa Cámara Ámbar, que era un salón de baile.  Aún hoy en día está en paradero desconocido. Se hizo famoso por salir en la película de dibujos animados: Anastasia. Lo que hoy se puede ver es una reconstrucción de su época de esplendor, ya que durante la guerra fue destruido.

• TEATRO MARIINSKY

Este teatro, se llamó así en recuerdo de la emperatriz María, esposa de Alejandro II. Es uno de los teatros más antiguos e importantes de Rusia. Fue inaugurado en 1860. El edificio ocupa el solar de otro teatro anterior (se llamaba Teatro-Circo Imperial) destruido en un incendio. Por su escenario han pasado destacados artistas de ópera y ballet, como la famosa Ana Pávlova. La Orquesta del Teatro Mariinskyi es una de las más antiguas instituciones musicales de Rusia. Fundada en el siglo XVIII, durante el reinado de Pedro el Grande, antes de la Revolución se la conocía como la Orquesta de la Ópera Imperial Rusa.

Para mi fue todo un privilegio poder presenciar una función de ballet en este teatro, te lo recomiendo.

• EL CASTILLO DE SAN MIGUEL

El zar Pablo I lo mandó construir porque se sentía poco seguro en el Palacio de Invierno. Pero pese a que el castillo se encontraba rodeado por 4 partes de agua y la construcción era bastante solida su presentimiento se confirmó y a los 40 días de haberse mudado allí fue asesinado.

No te pierdas la próxima semana, el interesante post:

“SE LIÓ LA REVOLUCIÓN”

En este post veremos cómo, el hartazgo del pueblo oprimido, llevó a la revolución que terminaría con el régimen zarista.