ESTAMBUL UN PUENTE ENTRE ORIENTE Y OCCIDENTE

Estambul es la única ciudad del mundo que se encuentra a caballo entre dos continentes: Asia y Europa. La mezcla de la cultura oriental y de la occidental, la convierten en un lugar peculiar que a nadie deja indiferente.

Serían las 5 de la mañana cuando el avión aterrizó en la ciudad. Cogimos un taxi rumbo al hotel y ahí escuche por primera vez el EZAN (llamada a la oración de los musulmanes). Un almuédano recitaba desde lo alto de un minarete, en una ciudad desierta, una llamada a la oración en árabe que venía a decir: “Ala es grande, no hay más Dios que Ala, Mohamed es el profeta de Ala, ven a la oración, ven a la salvación.” Nunca antes había estado en un país cuya religión predominante era la musulmana y el cantico al romper el alba me impresionó.

La parte occidental de Estambul es la Europea y la más turística y la parte oriental es la asiática, menos turística pero para muchos, más auténtica.

Mi primer día fue una toma de contacto con la ciudad no turística, ya que desorientados cruzamos, sin saberlo, el puente Gálata que nos llevó al lado asiático. Suerte que la gente es muy amable y te socorren cuando te ven la cara de giri despistado que llevas. Esto lo comprobamos a la hora de comer. Nos metimos en un bar lleno de gente y no encontrábamos sitio para sentarnos, entonces una chica muy amable nos ofreció que nos sentáramos con ella en su mesa.  Nos comentó que trabajaba en un banco de la zona y gracias a que chapurreaba algo de español nos hizo de interprete con el camarero y pudimos comer. En vista del éxito decidimos contratar un guía que nos situará y orientará sobre la ciudad. Con él recorrimos la parte Europea de Estambul donde se encuentran los lugares más importantes que debes visitar. Asi que una vez orientados y con el mapa en la mano, nos dedicamos a visitar todos los rincones que ofrece esta acogedora ciudad.

LAS VISITAS OBLIGADAS CUANDO VIAJAS POR PRIMERA VEZ A ESTAMBUL:

• SANTA SOFIA

Basílica cristiana cuando Estambul era por entonces Constantinopla y por lo tanto de religión cristiana ortodoxa, posteriormente llegaron los otomanos que fueron los que dieron el nombre de Estambul a la ciudad y transformaron a Santa Sofia en mezquita, ya que ellos eran de religión musulmana. Los musulmanes no tienen imágenes en sus templos por lo cual se dedicaron a tapar los mosaico de Santa Sofia con barro. Hoy en día Santa Sofía es un museo y se han podido recuperar los mosaicos gracias a que el barro los conservó en buen estado. Hay que tener en cuenta que Turquía ahora es un país laico, pero con una gran parte de su población de religión musulmana.

• LA MEZQUITA AZUL

Es conocida con este nombre por el color de sus azulejos. Se edificó frente a Santa Sofía para enfrentarse a su grandeza y superarla.  Los 21.043 azulejos que colorean de azul su interior, y las más de 250 vidrieras fabricadas en Venecia, con incrustaciones de piedras preciosas, por las que atraviesan la luz, supuso un costo desmesurado para las arcas del Estado, pero sin duda consiguió el objetivo de crear una mezquita impresionante.

• EL PALACIO DE TOPKAPI

Conocido también como la puerta de los cañones, se construyó tras la caída de Constantinopla fue la residencia de los sultanes durante 400 años. Topkapi era el “Palacio de las Mil y una Noches”. Por el lujo y porque una de las partes más destacadas del palacio era el harén o zona privada. Aquí vivían las 300 concubinas (las cuales no podían ser musulmanas) y que estaban destinadas a satisfacer cualquier deseo erótico del sultán.  Aquí sólo tenían acceso el sultán, su madre y sus 4 esposas. La otra parte importante del Palacio es la Sala del Tesoro. Repleta de joyas, destacan dos por encima del resto, me refiero a: La Daga de Topkapi y la otra el Diamante que llevó el sultán Mehmet IV en su turbante el día de su coronación. Otras curiosidades del palacio son sin duda las reliquias religiosas que conserva, entre ellas destaca la huella en bronce del pie del profeta Mohamed y unos pelos de su barba. Pero también vemos un relicario de oro que contiene los huesos de San Juan Bautista y parte de su cráneo que corresponde al periodo de cuando la ciudad era Constantinopla y por lo tanto cristiana.

• EL GRAN BAZAR

Situado en la parte europea de la ciudad, es el centro comercial más grande y antiguo conocido (1466). Tiene 58 calles, 22 entradas, 4000 tiendas y en el trabajan unas 20.000 personas. Antes de visitarlo debes conocer unas cuantas cosas. Los vendedores del gran bazar son unos comerciantes muy hábiles. Muchos de ellos no sólo hablan perfectamente el español, sino que hasta te dirán la alineación de tu equipo de futbol. Siempre, siempre hay que regatear el precio que te dan. Cuando entras a alguna de las tiendas sobre todo la de kilims (alfombras) te ofrecerán una taza de té de manzana, es un gesto de su hospitalidad. Hablando de Kilims debes saber que las alfombras más antiguas son más caras que las nuevas. Ojo he dicho antiguas no usadas.

A parte de las famosas alfombras, aquí puedes encontrar muchas joyerías, como en la mayoría de los países de religión musulmana. El motivo es que el amor no se expresa con flores sino con joyas. Si el hombre desea divorciarse de su esposa, según una costumbre antigua le tendría que decir tres veces “vete”. Después de esto, la mujer tenía que irse de su casa llevando solamente las cosas que en ese momento llevara puestas. Por este motivo las mujeres siempre llevaban todas las joyas regaladas. El bazar a parte de estas tiendas y de las típica de farolitos de cristal y juegos de té, tiene auténticas falsificaciones de ropa, calzado y bolsos de las mejores firmas, pero ojo también hay quien te vende calcetines de Lacoste que el cocodrilo se va al Bósforo antes de que te lo termines de subir.

• ISLAS PRINCIPE

Coger un ferry y dar una vuelta por el mar de Mármara visitando las islas príncipe también es una buena idea si quieres relajarte del bullicio de la ciudad. Los vehículos a motor están prohibidos, y solo se pueden recorrer las islas a pie, en bicicleta, en coches de caballos, o a lomos de un burro.

• LA TORRE GÁLATA: Conocida como la centinela de Estambul es un icono de la ciudad. Su mirador permite una visión de 360º desde donde puedes contemplar la mágica puesta de sol sobre la ciudad. Luego puedes cenar en su Restaurante. Es aconsejable reservar.

Esta torre tiene una leyenda que dice que un valeroso otomano, influenciado por los instrumentos voladores ideados por Leonardo da Vinci, tomó la decisión en el siglo XV de crear unas alas de madera. El joven subió a la torre y se tiró, consiguiendo atravesar el Bósforo, hasta el lado asiático, convirtiéndose de esta forma en el primer hombre que conseguía caminar los cielos.

No te pierdas la próxima semana, el interesante post:

“ESTAMBUL CONSTUMBRES Y SUPERSTICIONES”.

 En este post encontrarás las costumbres y supersticiones que tienen los estambulenses. Esto te evitará conflictos, de hacer algo indebido, como enseñar la suela del zapato.